Escuelas E.U.C.I. abrió sus puertas el 2 de mayo de 1954 cuando un ser humano excepcional, el Profesor Hebert D. Pugliese del Río, su fundador, apostó de lleno a la enseñanza en su querido Uruguay teniendo presente el pensamiento del prócer José G. Artigas, a quien tanto admiraba “SEAN LOS ORIENTALES TAN ILUSTRADOS COMO VALIENTES”.
En sus humildes inicios en la calle Talcahuano, el único curso que se dictaba era “Técnico en Radio”. Con el surgimiento de la televisión el Prof. Pugliese se convirtió en el segundo docente del país en impartir los conocimientos técnicos relacionados con ese tema. Con el paso del tiempo se agregaron nuevos cursos y E.U.C.I. se trasladó ampliando su capacidad locativa para la calle Manuel Pagola, luego pasó a funcionar en Paysandú y Florida y, por último, a partir de 1970 se instaló en la ya reconocida dirección de 8 de Octubre y Propios, contando con 1850 metros cuadrados afectados exclusivamente a la enseñanza.
Hoy podemos decir con orgullo que en E.U.C.I. se han diplomado miles de alumnos, muchos de los cuales están diseminados por el mundo, porque nuestro diploma está reconocido dentro y fuera de fronteras. Hace unos años una delegación australiana hizo un relevamiento de institutos de enseñanza en América Latina y fue reconocido el diploma de Escuelas E.U.C.I. como de “alto nivel”. La prueba más elocuente es la cantidad de egresados que están trabajando en el exterior y de los cuales constantemente recibimos noticias.
En consecuencia, desde 1954 estamos abocados a la tarea de capacitar, brindar conocimientos válidos y actualizados, dedicándonos a ello con total responsabilidad y seriedad, es lo que nos ha permitido mantenernos vigentes en un mercado cada vez más competitivo.
Nuestro principal objetivo consiste en preparar técnicos responsables para el nuevo milenio. E.U.C.I. apuesta a una formación segura proporcionando un aprendizaje efectivo que posibilite el ingreso rápido y exitoso al mercado laboral.
Es importante destacar que no sólo ponemos énfasis en el factor pedagógico, sino también en el factor humano, porque consideramos fundamental fomentar en nuestros alumnos normas de conductas adecuadas, actitudes responsables y el respeto hacia los demás, apostando a la construcción de una sociedad más humanizada. Aplicando siempre las premisas fundamentales de quien fuera en vida nuestro querido maestro y guía, el Señor Director General, Profesor Hebert D. Pugliese del Río.